Hace un par de semanas, un objeto girador no identificado invadió el patio del colegio. Los niños lo llevaban entre sus dedos pulgar e índice mientras lo hacían girar sin parar sobre su eje central. No entendía nada, pero ellos parecían estar muy emocionados.
No tardé mucho en coger uno y preguntar.
– «Pues son Spinners, Silvia, hay en un montón de colores».
– «¡Aaaaaah!» 🙄
En vista de la avalancha me puse a leer sobre el tema:
- Su nombre completo es Fidget spinner.
- Lo inventó una madre hace 2 décadas para entretener a su hija de 7 años. (El diseño original era diferente). La patente expiró en 2005 y no la renovó porque no tenía dinero.
- Algunos defienden su utilidad en personas con autismo, déficit de atención o estrés.
- Los hay de distintos materiales (plástico, metal) y colores. Los hay que brillan en la oscuridad e incluso con luces que se activan con el movimiento.
- Su precio oscila entre los 2 y los 15€.
- En Estados Unidos y Gran Bretaña están empezando a prohibirlos.
Al principio me resultó un artilugio curioso pero, pocos días después, ya no lo soporto.
Durante mis clases (cada 45 minutos cambio de grupo) los alumnos de dedican a girar el spinner. Cuando les digo que paren, como también han oído eso de que «mejora la concentración y relaja», pues ya tienen la excusa perfecta. Y así, la que se descentra y se pone nerviosa, soy yo, que los veo girando mientras yo explico.
En menos de 1 semana he acabado mandando un mensaje a los padres de mis alumnos a través de Class Dojo (algún día os hablaré de esta plataforma que utilizo en clase), para pedirles que hablen con sus hijos para que no los traigan a mi aula.
Entiendo perfectamente que sea una diversión, que estén motivados por aprender nuevos trucos, que se esfuercen practicando… pero en cuanto interfiere en la dinámica del colegio empiezan los problemas.
Sobre todo porque basta que algo esté prohibido para que los niños tengan más ganas de usarlo, no nos vamos a engañar.
No sé cuánto tiempo durará esta moda. Pensaba que la tontería de darle la vueltecita a la botella o hacer el gesto ese que aún no entiendo con los brazos hacia arriba, pasarían pronto, pero no tiene pinta 🙈 Cada curso la misma historia. En esta foto de Maestra de Pueblo (de la que soy muy fan) se resumen las modas de este curso 17-18 en nuestros los colegios.
No os penséis que solo son moda en España. Hace poco vino un colegio francés con el que estamos hermanados y las competiciones de lanzamiento de botella eran un show 🙈.